SALMO XXIII

       Te veo caminando, migrante,
y me pregunto:
       ¿Qué número de sueño,
calzan tus pies mal entendidos?
       ¿Qué proporción de geografía
entra en tus ojos casi ausentes?
       ¿De qué tamaño es la simiente
que guarda tu corazón para estas ocasiones?